El agua con la que te bañas, te cepillas los dientes y que muchas veces usas para cocinar reposa durante largas horas en tu tinaco y cisterna, ¿te has asegurado de que estos contenedores mantienen el agua limpia y libre de patógenos?
Los depósitos de agua son uno de los principales orígenes de enfermedades como cólera, hepatitis, amibiasis, tifoidea y otras enfermedades gastrointestinales y de la piel. Con el paso del tiempo, los tinacos y cisternas van acumulando bacterias, que contaminan el agua que pasa por ellos, y terminan afectando la salud de las familias.
En 2019, las enfermedades gastrointestinales fueron el segundo tipo de enfermedad más común en México, que en parte se deben al consumo de agua con alto contenido de bacterias. Aunque no bebamos el agua de la llave, al lavar los dientes, los platos y utilizarla en el aseo del hogar, las bacterias quedan en el ambiente y terminan ingresando al cuerpo y causando enfermedades.
Por eso, las autoridades sanitarias de nuestro país recomiendan lavar cada seis meses tinacos y cisternas, tallando bien todas las superficies de estos depósitos con cepillo y desinfectantes como jabón y cloro, y tomando las precauciones necesarias para la seguridad.
Si contratas a una empresa que te brinde este servicio, asegúrate de que realicen una desinfección completa, que utilicen productos amigables con la salud y el medio ambiente, y que tomen todas las medidas de seguridad al hacerlo, para evitar accidentes e intoxicaciones.
En Quimiwork, nuestro servicio de desinfección de tinacos y cisternas cuenta con todas estas características y una atención personalizada. Si tienes dudas, pregúntanos, estamos para asesorarte.
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